Tel Aviv/Beirut (01 de octubre de 2024). La situación en Oriente Próximo se agrava con el aumento de los enfrentamientos armados y nuevas tensiones diplomáticas. En una acción sin precedentes, Israel ha decidido prohibir la entrada al secretario general de la ONU, António Guterres, argumentando que no condenó “con suficiente claridad” el ataque realizado por Irán el martes pasado. Esta decisión ha profundizado las diferencias entre Israel y las instituciones internacionales.
Israel justificó que esta medida refleja el creciente distanciamiento del país con las organizaciones multilaterales. Mientras tanto, la violencia se expande en varios frentes de la región. Tanto Israel como el grupo libanés Hezbolá confirmaron un recrudecimiento de los combates en el sur del Líbano, donde se han registrado enfrentamientos directos entre soldados israelíes y combatientes de Hezbolá. Estos enfrentamientos, que comenzaron tras una incursión terrestre de Israel hace dos días, han resultado en la muerte de al menos ocho soldados israelíes, según fuentes del ejército.
El G-7 condena el ataque iraní
La reacción internacional no tardó en llegar. Los líderes del G-7 emitieron una condena categórica al ataque iraní contra Israel. El martes, varios misiles balísticos disparados desde Irán impactaron en bases militares israelíes. Aunque no se reportaron víctimas, Israel confirmó que algunos de los misiles o sus fragmentos lograron evadir los sistemas de defensa antiaérea y alcanzaron objetivos militares.
Este ataque ha sido interpretado como una provocación significativa en un contexto de conflicto ya tenso. Los líderes del G-7 expresaron su preocupación por el aumento de las hostilidades y llamaron a la comunidad internacional a tomar medidas decisivas ante lo que consideran un “acto de agresión” por parte de Irán. Asimismo, esta condena refleja la preocupación por la creciente inestabilidad en una región clave para la geopolítica y los intereses energéticos globales.
Guterres advierte sobre la escalada de violencia
Paralelamente, António Guterres se dirigió al Consejo de Seguridad de la ONU, alertando que la situación en Oriente Próximo se está transformando rápidamente en un “infierno”. Durante su discurso, destacó que los múltiples focos de conflicto no solo amenazan la estabilidad regional, sino que también suponen un riesgo para la paz mundial. A pesar de que Guterres ha condenado en varias ocasiones los ataques de Hamás, Israel lo criticó por no haber sido lo suficientemente explícito en su postura respecto al ataque iraní.
Tras la decisión de Israel de prohibir la entrada de Guterres, la ONU lamentó la medida y enfatizó la importancia de mantener abiertos los canales diplomáticos en tiempos de alta tensión. La organización recordó que el diálogo y la diplomacia son esenciales para la resolución de conflictos, sin responder directamente a las críticas de Israel.
Escalada del conflicto en el sur del Líbano
Simultáneamente, los enfrentamientos en el sur del Líbano entre Israel y Hezbolá han alcanzado niveles críticos de violencia. Desde que comenzó la incursión terrestre de Israel, los combates entre las fuerzas israelíes y los milicianos de Hezbolá han sido particularmente intensos, con choques directos. El ejército israelí señaló que las tácticas de guerrilla empleadas por Hezbolá, en terrenos montañosos y urbanos, complican sus operaciones convencionales.
El líder de Hezbolá, Hasán Nasralá, afirmó que “la resistencia está firme” y que sus fuerzas siguen combatiendo contra la invasión israelí. Hezbolá, conocido por su considerable arsenal de cohetes y misiles, ha respondido con fuerza a los ataques israelíes, prolongando un conflicto que ha afectado gravemente a la región durante años.
Crisis humanitaria en aumento
La intensificación del conflicto ha provocado una crisis humanitaria que sigue empeorando, especialmente en el sur de Líbano y en Gaza. En Beirut, un ataque aéreo israelí en el barrio de Dahiye, al sur de la ciudad, provocó un incendio en un edificio, según informaron los medios locales. Este ataque es parte de la ofensiva israelí contra posiciones de Hezbolá en Líbano, un país que ya enfrenta una grave crisis económica y social.
Organizaciones humanitarias han alertado sobre el empeoramiento de la situación de los civiles atrapados en las zonas de combate. La Cruz Roja Internacional reportó que miles de personas han sido desplazadas en las últimas 48 horas, buscando refugio en zonas más seguras o intentando huir a países vecinos. En Gaza, los bombardeos israelíes han causado numerosas víctimas civiles, lo que ha llevado a la ONU a pedir la creación de corredores humanitarios para facilitar la evacuación y brindar asistencia a los afectados.
Impacto del ataque iraní en Israel
El ataque iraní, considerado uno de los más directos por parte de Teherán contra Israel en los últimos años, ha puesto a prueba las defensas del país. Aunque el sistema antimisiles “Cúpula de Hierro” interceptó la mayoría de los misiles, algunos lograron impactar en bases aéreas, lo que ha incrementado la sensación de vulnerabilidad en la sociedad israelí frente al poder militar de sus enemigos.
Con el conflicto en Oriente Próximo en un momento crítico, la situación continúa deteriorándose. Los líderes internacionales, desde Washington hasta Bruselas, siguen con atención los acontecimientos, mientras se multiplican los llamamientos a la calma y a la búsqueda de soluciones diplomáticas que pongan fin a la escalada de violencia que amenaza con desbordarse.